Pequeños hoteles con encanto en COPENHAGUE

Si hay una capital que lidera la excelencia ecologista en Europa esa es Copenhague, en el marco de un país con altos estándares de bienestar social. Ciudad bike friendly por excelencia, la bicicleta figura como medio de transporte preferente. En la costa oriental, la capital de Dinamarca tiene como uno de sus iconos La Sirenita, pequeña escultura que evoca un relato del genial escritor danés Hans Christian Andersen.

A orillas del mar Báltico, el puerto de Nyhavn es un canal festoneado por edificios del siglo XVII. Hoy reconvertido en una de las zonas más estimulantes de esta ciudad a la vez relajada y con una inquieta vida creativa. La cultura del diseño forma parte de su ADN y tiene uno de sus templos en el Museo de Diseño Danés.

Copenhague también ha devenido capital gastronómica de Escandinavia por la maestría de sus chefs. En Stroget, la calle peatonal más larga de Europa, se haya su núcleo comercial en pleno casco antiguo. Los Jardines Tivoli albergan uno de los parques de atracciones más longevos del mundo. Inaugurado en 1843, emana un encantador aroma vintage. Igual que la comuna utópica de Christiania, fundada en la década de los 70 del siglo XX como apuesta alternativa en el corazón de Centroeuropa.

Como no, muchos de los establecimientos hoteleros de Copenhague disponen de servicio de bicicletas. Instalados en enclaves únicos de la ciudad, desprenden gran personalidad.