Pequeños hoteles con encanto en LEINSTER

Es la provincia más oriental de Irlanda y entre la docena de condados históricos que agrupa se encuentra el de Dublín. La capital del país, del mismo nombre, despunta como ciudad cosmopolita con una intensa vida cultural. Su halo literario se encarna en la figura del escritor James Joyce. Y es legendaria la vibrante vida popular en sus tradicionales pubs, donde degustar la cerveza negra Guinness, inventada aquí.

Conocida como la isla Esmeralda, en Irlanda entre el verdor de sus paisajes se descubren deliciosas localidades medievales como Kilkenny: con magnifico castillo del siglo XIII rodeado de jardines, callejuelas adoquinadas y pasajes secretos.

El patrimonio histórico asentado en la orilla de los ríos da estampas románticas imborrables. El imponente castillo de Trim de estilo anglo-normando, junto al rio Boyne, figura como el mayor del país. En el condado de Offaly, los vestigios de la abadía y conjunto monástico paleocristiano de Clonmacnoise, del siglo VI, emergen espectaculares al navegar por el río Shannon.

En las montañas de Wicklow, el conjunto de ruinas monásticas de Glendalough, próximo a sus lagos, resulta de gran belleza. Si eres amante de la hípica, el condado de Kildare es un destino de renombre mundial. Sofisticados hoteles boutique de corte clásico, en ciudades y en la campiña, ocupan edificios excepcionales.