Civilizaciones muy distintas han dejado su huella en este país: desde los asirios y los hititas, pasando por los griegos, los romanos, los bizantinos y los otomanos.

Además de los monumentos y complejos arqueológicos, los escenarios naturales son especialmente bellos y también muy contrastados: los interminables campos de olivos, los paisajes propios de un cuento de hadas de la Capadocia, los cursos del Éufrates y del Tigris, las piscinas naturales de Pamukkale, las montañas de Kaçkar o las costas del mar Negro, del Mediterráneo y del Egeo, con sus preciosos puertos naturales. Los pequeños hoteles con encanto que hemos seleccionado en Turquía se encuentran en Estambul, en la Capadocia y en la

costa del mar Egeo. En Estambul los hoteles boutique se concentran a ambas orillas del Bósforo, entre Europa y Asia. Urgup es el centro neurálgico de la Capadocia. Desde allí podemos hacer diversas excursiones para visitar los insólitos paisajes que se suceden en esta región, y que son el resultado de una tremenda erupción volcánica.

La bonita costa del Egeo está formada por un sinfín de calas y pequeños acantilados cubiertos de pinos y olivos. Además, la costa está salpicada de interesantes ruinas romanas, bizantinas y licias.
Bodrum, Fethiye y Kalkan son las bonitas poblaciones costeras en las que se encuentran nuestros pequeños hoteles de lujo.